En estos días de cuarentena los grupos explotan con recomendaciones para ver en Netflix, sean series o películas. En uno de esos grupos, recomendaron una película que nunca había escuchado Milagro en la celda 7.
El único comentario fue: “es bellísima y no pararás de llorar.” Realmente no estaba buscando una película para ver y mucho menos si era para llorar; suficiente tenemos con lo que está pasando en el mundo, pensé.
Lo que sí les puedo decir es que valió 100% la pena cada lagrimita derramada y que es un must en este tiempo de cuarentena.
Haciendo un poco de research de la película, me di cuenta que hay dos películas con el mismo nombre y la misma trama; una es turca y la otra es de Corea del Sur. La que pueden encontrar en Netflix en la versión turca. Aquí les dejo el trailer:
1. Puesta en escena
En cuanto a la puesta en escena puedo decir que es un peliculón. No se esperen grandes efectos cinematográficos o mucho más… lo que realmente impacta en esta película son los diálogos. Sin embargo, es importante destacar que logran de manera magistral recrear la Turquía de la época.
Le otorgo un 5/5 a este aspecto.
2. Trama
La trama de esta película es la que conquista tu corazón desde el minuto 1. Brevemente les cuento que trata de una padre, Memo, que tiene una gran discapacidad mental, es acusado de un crimen y va a la cárcel. A su vez, a lo largo de la historia te cuentan su relación con su hija Ova y el profundo amor que esta tiene por su padre.
Las historias se mezclan unas con otras y mantienen una línea excepcional que te mantienen entretenido. ¡Aviso! Es una película larga, pero en ningún momento sentí que me aburrí, ni mucho menos.
Le otorgo un 5/5 a este aspecto.
3. Moralidad
Spoiler alert! En este apartado encontrarás algunos spoilers así que si no has visto la peli y no quieres que te la arruine, no sigas leyendo.
¿Por qué recomiendo esta película ampliamente para estos momentos de cuarentena? Porque creo que esta historia resume en gran medida cómo está hecho el corazón del ser humano y cómo esta cuarentena nos lo ha ido comprobando.
Memo entra a la cárcel y es brutalmente golpeado por sus compañeros de celda, es considerado como un loco, un discapacitado y alguien que no tiene una misión en la vida; que no sirve para nada. Pero en la medida que sus compañeros van compartiendo con él, se comprueba aquella frase que le decía la abuela a Memo: “tú tienes un gran corazón, un corazón como ningún otro.”
Para aquellos que hemos tenido en algún momento de nuestras vidas algún contacto con una persona con algún problema mental, sabemos que ellos con los que más pueden enseñarnos lo que es el amor. A través de su sencillez nos recuerdan en cada momento cuáles son ls cosas esenciales en nuestra vida.
Una de las escenas que más me impresionó de la película es cuando Ova va por primera vez a visitar a su papá en la cárcel. Es un momento mágico cuando cada uno de los compañeros de celda de su papá va narrando de qué están “enfermos” y cómo ellas con su sencillez y alguna palabra sencilla logra tocar los corazones más duros y crueles.
A su vez, me impresionó y conmovió muchísimo el ver cómo esos hombre que desde el inicio despreciaban a Memo, poco a poco van encontrando en él un ser humano capaz de amar y ser amado. El corazón del hombre está hecho para amar y para el Amor… ¡Sí! Amor con mayúscula, porque estamos hechos para Dios. Solo en Dios encontramos ese verdadero amor, porque es el Amor en sí mismo; y una manera tangible de encontrar el amor de Dios es en la donación al otro.
Ahora en estos días de Cuaresma que nos preparamos para la Semana Santa, al ver esta película podemos ver cómo el ser humano está dispuesto a donarse por completo a otro por amor. ¡Cuánto más no ha hecho Dios por nosotros al entregar su vida en la cruz!
En este apartado podría extenderme un poco más, pero no quiero arruinarle por completo la película a aquellos que sí siguieron leyendo.
Si ya viste la película, me encantaría saber qué opinas y cuáles fueron tus partes favoritas. ¡Déjalo en los comentarios!