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La pornografía no tiene nada de malo ¿o sí?

Me llamo Ricardo, recuerdo perfectamente cuando vi pornografía por primera vez. Cursaba la secundaria, cuando uno de mis compañeros nos enseñó una revista de mujeres desnudas. Éramos un grupo de seis adolescentes entre ellas dos mujeres. Mucha curiosidad me causó esta revista, después comencé a buscar más publicaciones. Han pasado ya varios años desde este suceso y sigo consumiendo pornografía, nadie lo sabe, me causa miedo y pena poder reconocerlo…

Me llamo Paola, hace unos días recibí un whatsapp de un compañero de clase, me pedía mi “pack”, después de varias insistencias le pasé la foto que pedía. Unos días después fui blanco de burlas en mi colegio, mi fotografía ya estaba en los celulares de la mayoría de chicos…

Hola, soy Alejandro, por el lugar en donde ahora me encuentro y lo que represento socialmente es inadmisible que pueda reconocer que veo pornografía. Antes era sólo por las noches, ahora lo hago cada vez que puedo…

Mi nombre es Lorena, alguna vez leí en una publicación que hablaba sobre sexualidad que recomendaban ver pornografía en compañía de la pareja. Le propuse esto a mi novio, primero “se sacó de onda” que yo estuviera proponiéndole tal cosa. Ahora disfrutamos mucho ver material pornográfico, últimamente hemos comenzado a grabarnos mientras tenemos intimidad…

Historias como estas reflejan la vida oculta y otras no tanto de personas que consumen pornografía en el mundo. En 2017 Pornhub, sitio online con contenido erótico, publicó que por día recibe en promedio 64 millones de visitantes, esto quiere decir 729 personas por segundo. En horas equivale que los consumidores de este sitio vieron 4 599 00000 horas o 524 641 años. Los principales países consumidores son Estados Unidos, Reino Unido y Canadá, México ocupó ese año el lugar once.

El sitio preferido para ver contenido erótico de esta página es a través del teléfono celular con el 61%. Espera un momento, estamos hablando solamente de esta plataforma, en realidad son innumerables los sitios y posibilidades que actualmente existen para ver contenido pornográfico, tan sólo en 2007 se contabilizaban 1.6 millones de sitios web.

¿Qué es la pornografía?

Intentemos comenzar con la definición de pornografía. Esta palabra tiene su origen griego, se puede entender como “tratado sobre la prostitución”. El Catecismo de la Iglesia católica nos dice que consiste en sacar de la intimidad de los protagonistas, actos sexuales, reales o simulados, para exhibirlos ante terceras personas de manera deliberada.

En la actualidad la pornografía dejó de estar oculta, las sex-shops están en cualquier plaza comercial, las revistas, las películas, todo está al alcance de cualquiera, basta con que uno mire un puesto de periódicos y revistas; existen calles comerciales que literalmente están llenas de todo tipo de contenido erótico.

A partir de los años ochenta la industria pornográfica vio cómo prosperaba a tal punto que los ingresos en ganancias para esta superaron a los generados por el cine y los videojuegos. La plataforma que nos ofrece la web ha abierto las puertas para que con un click uno pueda acceder, no existen controles reales donde la pornografía sea para uso de los adultos, tanto niños como adolescentes pueden mentir sobre sus datos, crear cuentas falsas.

Los teléfonos celulares hicieron aún más privada la navegación, en cualquier lugar con internet se tiene acceso, parece realmente una ola difícil de parar, pero, ¿Por qué tiene tanto éxito la pornografía? ¿Tiene consecuencias para quien la consume? ¿Qué hay detrás de esta industria?

Una sociedad que consume todo, hasta personas

Hablemos un poco del contexto en el que vivimos. Actualmente nos encontramos en un mundo donde el consumo es una de sus principales características, se sueña con lo que se quiere tener, con lo que nos gustaría comprar, por todos lados nos bombardean con productos para que sean consumidos, hay comerciales en donde literalmente te dan la orden para que vayas a comprarlos.

Pienso en este momento en las ventas de determinados calzados deportivos, o celulares, en donde la gente pasa horas enteras para ser los primeros en adquirir el producto, no importa el precio. Desafortunadamente también el consumo ha ido encaminado a ver a las personas meramente como un producto comercial más.

En la web se puede consumir todo, todo; puedes adquirir una pareja virtual, hace poco vi la noticia de una persona que se había casado con un avatar, porque es preferible mantener una relación con algo que no implique un compromiso. El encuentro con una persona viva requiere de habilidades sociales de las que uno puede carecer o que pueden resultar inadecuadas, y es que al mirar a una persona  de una u otra manera develará quiénes somos. Tiene sentido hacer como el avestruz, enterrar la cabeza y bajar la mirada, nunca mirar a los ojos y hacer de mi yo interior algo inescrutable. En la era actual la mayoría tenemos la cabeza enterrada pero en un dispositivo electrónico.

La producción de muñecos que tienen rasgos muy realistas de hombres y mujeres está de moda, ahora puedes satisfacer tus necesidades sexuales ahí, con eso. Tanto hombres como mujeres, prefieren consultar pornografía, porque solo será ese momento de disfrute, no habrá más. Cuando quiera más placer volveré a consumir pornografía, no tiene por qué gustarme una sola mujer o un solo hombre, imágenes interminables de todo tipo de estereotipos circulan frente a nuestros ojos.

Con la creación de las redes sociales se ha ido difuminando el concepto de privacidad. La gente es feliz de poder revelar su intimidad, pese a los filtros de privacidad que tienen las redes, realmente cualquiera puede vernos. Cualquiera puede saber  lo que hacemos,  dónde estamos, cualquiera puede robar nuestras fotos, muchas fotografías de mujeres han sido descargadas y ahora están en páginas de contenido erótico, otras personas han sido involucradas en situaciones donde son exhibidas teniendo relaciones íntimas, de ahí el cuidado y la precaución para saber qué compartes en tus redes sociales.

¿Quién consume pornografía?

La edad promedio de quienes consumen pornografía es de 35 años, sin embargo es el grupo que tiene entre 18 y 24 años quienes son los usuarios más frecuentes, seguido por los que tienen entre 25 a 34 años. Es decir que los que consumen más pornografía son esta generación conocida como millennials. Existe también el mito de que los hombres son quienes visitan más portales eróticos, en México en el año 2016 el 30% fueron mujeres quienes vieron pornografía. Sin duda alguna difícilmente alguien aceptará públicamente que consume pornografía, una misma persona puede ser al mismo tiempo un consumidor habitual de pornografía y un enemigo convencido. La sexualidad sigue siendo un tema tabú en diversos ámbitos de nuestra sociedad.

¿Qué consecuencias tiene el consumir pornografía?

Consumo de personas

Primero entramos en el círculo vicioso de convertir a las personas en meros objetos, que se pueden comprar, que se pueden usar, una mujer u hombre son meras piezas de carne para disfrute.

Distorsión de la realidad

Cuando un joven aún no ha tenido relaciones sexuales y comienza a ver pornografía su parámetro de normalidad se verá afectado, su cuerpo y el de su pareja no podrán compararse al de los actores.

Exhibición

Cuando compartes fotografías de tu cuerpo corres el riesgo de que circules en internet, esto te traerá muchas cosas negativas en tu vida, existen casos de personas que se han suicidado por el bullying recibido, uno de ellos es de la joven canadiense Amanda Todd en 2012.

Es una adicción

Estudios han revelado que la pornografía es equiparable al consumo de drogas, causa adicción, los usuarios sentían ansiedad por poder ver pornografía.

Cuidado con la pornografía

Entre los diversos puntos negativos de los que se pueden hablar de la pornografía es que también existen personas que son obligadas a mostrarse, hay mujeres que son robadas y después explotadas, sufren una esclavitud. También existe la pornografía infantil que es de las más graves, en donde niños son obligados a cometer actos que van en contra de su dignidad.

Conclusión

Por más que los padres quieran estar pendientes de lo que ven sus hijos, siempre habrá una posibilidad de que entren en contacto con la pornografía.

A través de la curiosidad el hombre ha hecho infinidad de descubrimientos, también ha sido la causante de perdernos en caminos violentos y destructivos. Es cierto, en un momento de nuestro desarrollo y crecimiento como humanos pasamos la etapa de reconocernos como  seres sexuados, la curiosidad sobre las relaciones sexuales, qué se siente, cómo se hace, etc. Todas estas dudas requieren ser aclaradas sin embargo la peor fuente de información será la pornografía.

Sin duda alguna el tema es inagotable para ser abordado desde diversas áreas, Podrás escuchar diversas opiniones, desde quienes están a favor y quienes la reprueban, lo importante es que tú estés informado y conozcas lo que implica consumir pornografía y qué hay detrás de ella.

Tú eres valioso, no tienes por qué demostrar nada a nadie, no permitas que nadie transgreda tu dignidad.

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